UNA POSIBLE VACUNA PARA LA ENFERMEDAD DE PARKINSON CREA ANTICUERPOS SEGÚN LOS RESULTADOS OBTENIDOS EN UN PRIMER ENSAYO EXPERIMENTAL

1/08/2014

Un ensayo clínico en fase inicial para probar la seguridad de una vacuna experimental en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson, muestra que la vacuna genera anticuerpos que combaten la acumulación de proteínas en el cerebro asociados con el trastorno. La vacuna está hecha por la compañía de biotecnología Affiris AG , que presentó los resultados hoy en una rueda de prensa en Nueva York con la Fundación Michael J. Fox que financia los primeros ensayos clínicos de la vacuna.

Affiris, en Viena, Austria, desarrolla terapias con vacunas a través de una tecnología basada en péptidos llamados epítopos , áreas en las moléculas a las que los anticuerpos se unen. Los epítopos en las vacunas AFFiRiS se conectan a las células B, las células blancas de la sangre programadas para generar anticuerpos que abordan un objetivo específico, en este caso – proteínas, alfa sinucleína cuya acumulación en el cerebro genera una patología asociada al trastorno neurodegenerativo de párkinson.

Se considera que la principal causa de la enfermedad proviene de la pérdida de células en el cerebro que producen dopamina, una sustancia química que ayuda a controlar el movimiento.
Parece ser que la acumulación de proteínas alfa-sinucleína puede dañar a las neuronas, o células nerviosas del cerebro. Affiris está desarrollando una vacuna con el nombre en clave PD01A que tiene como objetivo controlar los niveles de alfa-sinucleína en el cerebro, para evitar su acumulación.

Durante el ensayo clínico, desarrollado en Viena, participaron 32 personas con la enfermedad de Parkinson, con una edad comprendida entre los 40 y 65. A 12 de ellos, se les administró inyecciones mensuales por un período de un año de PD01A en dosis de 15 o 75 microgramos. A 8 pacientes le fueron administrados medicamentos para controlar los síntomas del Parkinson, mediante un procedimiento estándar, que sirvió como grupo de control.

En los primeros resultados presentados, alrededor de la mitad de los pacientes que recibieron la vacuna desarrollaron anticuerpos para la proteína alfa-sinucleína, que los investigadores encontraron en las muestras de suero, así como en el líquido cefalorraquídeo de los pacientes. El ensayo también midió los cambios en los síntomas motores y la cognición de los pacientes, produciéndose una mayor estabilidad entre los pacientes vacunados. Según Affiris la vacuna resultó segura y bien tolerada por los pacientes, objetivo principal de la medición del ensayo.

La compañía tiene previsto un estudio de seguimiento de los pacientes que recibieron PD01A, mediante la comprobación de los efectos adversos de la vacuna después de un año, así como la continua eficacia de la vacuna para generar anticuerpos e intervenir en los síntomas del Parkinson. Próximamente se llevará a cabo un ensayo clínico de etapa “intermedia” cuyo comienzo tendrá lugar en Septiembre.

Fuente: Science & Enterprise